Nómada

Era viejo. Tenía musgo en el tronco como si de un jersey se tratara.

Pocas hojas salían de su pequeñas ramitas, las cuales eran muchas que surgían de ramas mas grandes.

Hacía tiempo que ese arbol habia rehusado de tener frutos, pues estos eran demásido parlanchines, y ya se sentía muy mayor para soportar tanta arrogancia.

En ese momento, del cual se desarrolla esta pequeña historia, el sauce estaba cansado. Pues habia recorrido un largo camino con sus viejas raices.

Fue dificil escoger su nuevo hogar, pues recorrió medio mundo en la busqueda, y ahora sabía que con la ignorancia que le proporcionaba su estaticidad era más feliz. Pero ya no podía volver atrás, así que finalmente comprendió que debía adaptarse al nuevo mundo.

Era de noche. Se situaba en algún rincón, de alguna ciudad. Los edificios eran altos, y rodeaban una plaza poblada con algunos bancos vacios. No corría el aire. No se apreciaba vida ninguna en aquel lugar.

Se colocó en el centro de la plaza de cemento. Ese pavimento no era impedimento para unas raices duras y fuertes que se habían fortalecido gracias a un largo camino.

De un golpe seco hizo añicos el cemento. Atravesó el suelo todo lo que pudo hasta agarrarse lo mas profundo posible a la tierra.

Tras unos segundos de lucha, el sauce nómada, dejo de ser nómada.

Un brisa movió las escasas hojas.

El silencio.

Y finalmente descansó.

La Greis